Ya estoy harto de vivir tan solo,
de dormir tan solo,
de bailar tan solo,
de sentirme solo
cuando no estoy solo,
y de odiarte solo
por dejarme solo.
Me escuecen los huevos
porque ya estoy harto
de salir de casa,
de volver borracho,
de que no me entiendan
porque no hago caso,
de ser malo padre
porque he pecado.
Cuanto más sumiso eres
en la vida y no te quejas
te pegan una colleja
que te tiemblan las orejas.
Y es que así es este circo
de ratas y comadrejas.
Donde buscan algo estable,
yo sólo busco una puerta
para huir de aquí...
voy a huir de aquí...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario