Fotografía por Ruven Afanador
¿Qué quiere decir un "sí" cuando éste responde a la pregunta "¿me amas?". Ese "sí" puede ser sincero, pero no por éso tiene el mismo valor. "Amor" es una especie de palabra-valija en la que cada uno de nosotros deposita lo que a cada quien le conviene. Cuando uno habla de compromiso, el otro, con la misma palabra, a veces entiende atracción. Y de ahí surge entonces una cascada de malentendidos.
La media naranja es sólo un mito. Somos dos naranjas completas que nos juntamos para andar por la vida... porque a mitades no resulta. Pero en nuestros vínculos por lo general todos empezamos siendo un poco incompletos, no conociéndonos muy bien.
La persona amada puede ayudarnos a satisfacer ciertas necesidades, pero no está obligada a cubrir todas nuestras carencias. Lo máximo que el otro puede hacer es ofrecernos su compañía y su mejor esfuerzo para comprendernos.
Hay que esforzarnos y comprometernos con la persona que tenemos enfrente. Porque luego "cambiamos de diablo pero no de infierno".
La plenitud del amor se logra cuando en lugar de idealizar a la pareja, se le acepta. Porque cuando vemos a nuestro compañero tal cual es y no como lo soñamos, todo se derrumba. Y mientras más alto se vuela, más dura es la caída...
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